En la celebración del Día del Donante de Sangre de la Comarca Ribera Baja del Ebro, que tuvo lugar el 13 de marzo, los protagonistas indiscutibles del acto fueron los ciento ochenta y tres vecinos de los diferentes pueblos de la zona que, presentes o no en el salón de actos de la Casa de Cultura de Quinto, fueron homenajeados por su participación en las diferentes campañas de donación de sangre que se llevan a cabo a lo largo del año.
Hace años que la Hermandad de Donantes de Sangre de Zaragoza organiza este tipo de eventos, que en un principio tenía un ámbito provincial y que que desarrollaba en la capital aragonesa, pero que después se redujo a las comarcas, ya que en el primero de los casos la mayor parte de los invitados no podían acudir a la cita, por ser muy largos los desplazamientos.
La periodista Pilar Barranco fue la encargada de presentar la ceremonia celebrada en la Ribera Baja, una cita en la que estuvieron presentes los homenajeados y sus acompañantes junto a Javier Abenia, alcalde de Quinto, Antonio Clavero, vicepresidente de la Comarca y alcalde de Sástago, Carmen González Mongío, presidenta de Donantes de Sangre de Zaragoza, y Félix Ruiz y Ricardo González vicepresidente y secretario general de esta entidad respectivamente.
En su turno de palabra, Carmen González señaló que «los donantes de sangre son personas calladas, altruistas y anónimas que extienden su brazo para ayudar sin siquiera saber a quien. Son seres humanos de primera clase». Además, señaló que la comunidad autónoma es deficitaria en este elemento vital, ya que cada año necesita recibir aportaciones de otras regiones, por lo que es necesaria «una mayor solidaridad por parte de los aragoneses».
Igualmente, la sangre es vital en tratamientos médicos, «no sólo en transfusiones, también se hacen con ellas vacunas. De ahí la necesidad de donar», apunta la presidenta de la Asociación de Donantes.
Insignias
El acto central del evento fue la entrega de las insignias que distinguen a los donantes más generosos. Para ello, se prepararon 141 distinciones de bronce para otros tantos vecinos de la comarca que han dado su sangre en más de diez ocasiones, 39 de plata para aquellos que han participado en más de veinticinco campañas y tres de oro para los que contaban con su haber con más de cincuenta donaciones.
También se otorgó una distinción a David García Aznar, vecino de Gelsa y el donante más joven de año 2004, y por donar sangre con 65 años, la edad límite para ello, a Julián Zaporta, de Quinto. Igualmente, recibieron galardón Gregorio Villarroya, también de Quinto, de 84 años, un hombre que actualmente no está en activo, pero que ha sido donante en numerosísimas ocasiones.
Asimismo fue convocada a subir al escenario una representación de la Asociación de Viudas Santa Rita de Casia, del municipio anfitrión, para reconocer la importante labor de sus miembros en la organización de las campañas de su localidad.
El último galardón fue para el ayuntamiento con mayor índice de participación en las donaciones a lo largo del 2004, concretamente el de La Zaida, municipio que cuenta con un porcentaje de donantes del 88 por 1.000.
Todos ellos, recibieron muy gratamente el reconocimiento por su labor. Así, se desarrolló una jornada que fue muy especial los mayores protagonistas son los donantes de sangre.
Fuente: Cronica de la Ribera Baja.