Los habitantes de Quinto, y en especial los 80 vecinos que viven en la calle Santa Ana, por fin podrán cruzar al otro lado de las vías del tren sin correr peligro. Tras 45 años y mucho esfuerzo municipal, Renfe se ha decidido a señalizar el paso a nivel y unas señales acústicas y luminosas informan de la llegada del tren, algo muy útil si se tiene en cuenta que, hasta hace poco, los vecinos, que se veían obligados a cruzar las vías para cualquier necesidad básica, no tenían manera de percatarse de la llegada del tren hasta que éste no estaba prácticamente encima.
A pesar de la peligrosidad evidente del antiguo acceso, nunca ha ocurrido ningún incidente, riesgo que se ve ahora considerablemente reducido con el nuevo paso, que tiene, además, suelo antideslizante.
Ahora, desde el consistorio, se espera que los vecinos dejen de utilizar los demás accesos, ya que son mucho más peligrosos. Además, se procederá en próximas fechas al vallado del resto de la calle Santa Ana.
En el 2003, Renfe hizo un paso a nivel en un lugar cercano que servía para acceder a la zona de huertas, pero los vecinos de la calle Santa Ana no podían acceder a éste dada la situación de la zona, por lo que tuvieron que seguir utilizando los pasos viciosos. Con la construcción del nuevo paso en Santa Ana, Renfe ha inutilizado el paso hecho en 2003, lo que ha llevado a algunos vecinos a recoger firmas que piden que se haga un camino que vaya desde el nuevo paso hasta las huertas. El Ayuntamiento estudia posibles soluciones.
ESTHER ANIENTO. Cronica de la Ribera Baja.