El Ayuntamiento de Quinto ha transformado una antigua escombrera en una zona natural de esparcimiento que pretende servir para que los visitantes observen la flora y la fauna propia de la Ribera Baja del Ebro. El nuevo mirador, que cuenta con una amplia extensión de terreno, se ha situado en una zona alta de difícil inundación ante posibles crecidas del río.
Vista del parque desde el rio
El consistorio ha instalado en el nuevo espacio mesas y sillas y ha vallado el terreno. Además, de aquí a unos meses, alrededor de febrero o marzo, está prevista la plantación de árboles en esta zona para hacerla más acogedora.
El coste de la obra, que ha ascendido aproximadamente a 24.000 euros, ha sido financiado por el departamento de Medio Ambiente del Gobierno de Aragón. El Ayuntamiento de Quinto ha aportado al proyecto la obra civil, que ha sido realizada por los miembros de la brigada municipal.
Vista general
E. ANIENTO. Cronica de la Ribera Baja.